El propósito de un avalúo está normalmente vinculado al uso para el cual se destina, y generalmente se reporta el valor comercial, que está fundamentado en un análisis de mercado desarrollado en función de las características particulares del bien valorado, sin embargo, existen diversos propósitos que generan la solicitud de un avalúo y que pueden propiciar ligeras diferencias en la conclusión reportada.
Avalúos Comerciales
Proporcionan referencias para la compra-venta o indemnización, a nivel de consultoría se emplean para respaldar operaciones de índole mercantil o patrimonial.
Avalúos Fiscales o Catastrales
Establecen la base gravable para el cálculo de impuestos.
Avalúos para Aseguramiento
Definen el Valor asegurable para fines de indemnización por los daños generados por un siniestro y para el cálculo de la prima de riesgo.
Avalúos para Financiamiento
Proporcionan el Valor de la garantía prendaria o hipotecaria que respalda un crédito o una fianza.
Avalúos Judiciales
Definen el valor de un activo para negociar acuerdos en asuntos litigiosos.
Avalúos para efectos Contables, Bursátiles o Financieros
Calculan el Valor de los bienes para incluirlo en reportes financieros, acorde a las normas vigentes a nivel nacional e internacional (IFRS).
Avalúos para la Cuantificación del Lucro Cesante
Determinan el Valor del daño generado por la interrupción de la explotación o uso de un activo.